Los vecinos de Écija se afanaron este domingo en limpiar sus calles y sus casas, sus comercios y enseres, del barro que había dejado la nueva crecida del arroyo Argamasilla. Y lo lograron en su mayoría, ya que a última hora de la tarde se había liberado un 80% de las vías cubiertas por el agua y el lodo. Esta nueva catástrofe llega apenas dos semanas después de la última inundación, el pasado puente de la Constitución, que anegó estos mismos barrios además de las zonas cercanas al Genil que esta vez, por suerte, no se desbordó.Lo peor es que el peligro no ha pasado.
El alcalde de Écija, Juan Wic (PSOE), dijo a Europa Press que la previsión meteorológica apunta a «más agua» en los próximos días, por lo que teme nuevas inundaciones. En principio, la Agencia Estatal de Meteorología ha decretado la alerta amarilla para el lunes y el martes, con previsión de fuertes lluvias en toda la provincia. Wic reconoce que «esta vez se vivieron escenas de mayor dramatismo» y entiende que «las personas tienen unos límites, y es demasiado aguantar dos inundaciones en apenas dos semanas».Según fuentes municipales, un centenar de efectivos de diversos cuerpos de seguridad trabajaron en la limpieza de la treintena de calles afectadas, en las que se registraron unas 200 incidencias. Esas fuentes señalaron que resultaron afectadas una veintena de garajes y cocheras en estas calles. La mayor parte de efectivos (45) son operarios de Ecilimp, la empresa concesionaria de la limpieza; y otros 19 son miembros del Infoca, llegados en la mañana de ayer a Écija y que trabajan en el baldeo de las calles junto con 15 empleados de la empresa municipal de Urbanismo. Además, siete policías locales regulaban el tráfico y nueve bomberos achicaban agua en sótanos y garajes, con el apoyo de cinco voluntarios de Protección Civil.Las labores de limpieza se concentraron en Puerta Osuna, Cristo de Confalón y La Puente. La limpieza obligó a cortar al tráfico las calles Cava, Emparedamiento, Coronado, Padilla, Mendoza, La Victoria, Navajas, Ancha, Bermuda, Poeta Manolo Mora, Santiago, calle Arroyo, Paloma, así como Barquete, Santa Brígida, La Puente y Merinos. También estaban cortadas la avenida Cristo de Confalón, parte del Bulevar Pirula y Carretera de Herrera.Las consecuencias de la lluvia persistirán este lunes, ya que se han suspendido las clases en el colegio Miguel de Cervantes, con motivo de la limpieza de los patios del centro educativo, que se han visto anegados por el desbordamiento del arroyo. En este centro, la fuerza del agua ha arrancado parte de la valla que rodea el patio. También se suspenden las clases en el Centro de Adultos, que se abre precisamente en Puerta Osuna.La indignación de los vecinos provocó episodios de protesta, como la cacerolada espontánea de unas 50 personas en la calle Cava, reclamando soluciones definitivas a las, por desgracia, habituales crecidas del arroyo Argamasilla.También hubo quejas desde la oposición. El portavoz municipal y candidato del PA, Fernando Reina, advirtió de que el gobierno municipal (PSOE) «estaba avisado» de que la limpieza del cauce del arroyo Argamasilla era una necesidad «de emergencia» y atribuyó a «la lentitud y la negligencia» del Consistorio la situación que atraviesa Écija.»Esto ocurre porque el cauce del arroyo no está limpio en su integridad», señaló Reina, alertando de que el Ayuntamiento era consciente de que el cauce había de ser limpiado «antes de que llegasen las lluvias» y las labores promovidas a tal efecto «comenzaron el pasado mes de octubre».Por su parte, el PP achacó las nuevas inundaciones en Écija a la «inoperancia más absoluta» del Gobierno andaluz, a sus «promesas incumplidas y a la falta de previsión».
Fuente: http://www.elcorreoweb.es/sevilla/provincia/111556/vecinos/ecija/afanan/retirar/barro/inundaciones