Una de las dueñas de la casa de dos plantas ubicada en la localidad sevillana de Cazalla de la Sierra que se desplomó parcialmente en la noche de ayer sin causar daños personales aseguró ayer que lo ocurrido fue «un susto tremendo», ya que fue tan sólo cuestión de «dos segundos» que su familia «no se hundiera con la casa».
El incidente tuvo lugar alrededor de las 23,00 horas del dia 28 en una vivienda de dos plantas ubicada en la calle Antonio Merchán del municipio, junto a un inmueble que está siendo objeto de obras de reforma, barajándose como primera hipótesis que el temporal de lluvia y viento afectara a la cimentación del inmueble provocando su derrumbe parcial.
La dueña de la casa, Chelo, explicó que su familia, el matrimonio y los dos hijos menores, después de escuchar un ruido, tuvieron que abandonar la casa inmediatamente «en pijama y descalzos», lo que ha evitado que se produjera una tragedia. «El derrumbe se produjo ante los ojos de sus ocupantes, pero gracias a Dios no se ocasionó ninguna tragedia», subrayó.
La primera causa que se baraja es el temporal que ha azotado durante más de una semana el pueblo sevillano, aunque desde el Ayuntamiento de Cazalla de la Sierra se ha trasladado el suceso a la Consejería de Gobernación de la Junta de Andalucía con el objetivo de que sus técnicos se trasladen hasta el lugar de los hechos y, en colaboración con los técnicos municipales, determinen las causas del incidente.
En este sentido, Chelo relató que el derrumbe de la casa también lo han podido ocasionar las obras que se están realizando en el inmueble colindante. Además, lamentó que los peritos no hicieran caso a sus advertencias. «Yo les dije que deberían haber apuntalado la vivienda», subrayó.
Así, y mientras los servicios municipales han permanecido toda la noche en la zona para controlar la situación, tanto el matrimonio como sus dos hijos menores de edad, que estaban pasando la Navidad en el pueblo –aunque son naturales de la localidad viven en la capital hispalense–, se han instalado en casas de familiares, donde han pasado la noche.