La empresa encarece el bonobús sin transbordo, el título de viaje más demandado por el público, un 6,6% · Mantiene el precio actual del bonobús con transbordo con una recarga mínima de 7 euros.Tres títulos de viaje subirán de precio en 2011 y uno quedará congelado. El billete univiaje, el bonobús sin transbordo y la tarjeta mensual serán más caros. El bonobús con transbordo se queda igual. El consejo de administración de Tussam aprobó ayer las nuevas tarifas para 2011 de acuerdo con los informes económicos y comparativos realizados para avalar las subidas. El billete univiaje, demandado por un 10% de los usuarios, y cuyo precio en Sevilla -no así en otras ciudades- representa el coste real del servicio, subirá diez céntimos -un 8,3%-, justificado por el reciente incremento del IVA, la subida de un 20% en los carburantes y el hecho de que no se haya subido en este año. Con el precio de 1,30 euros se mantiene en el precio del coste real del servicio y queda en línea con el de las otras grandes ciudades. La medida principal aprobada es el mantenimiento del bonobús de diez viajes sin transbordo, título que ha sido suprimido en los servicios de transporte de casi todas las grandes ciudades como Valencia y Málaga.
En Barcelona no existía y en Madrid tiene un «alto» coste de 9 euros, según Tussam. En Sevilla lo usan el 25% de los usuarios, lo que ha hecho valorar su prestación, y sube a 6,40 euros, un 6,66%. El precio del bonobús de 10 viajes con transbordo no se modifica, manteniéndose en 7 euros, que es un precio «muy bajo» de entre las tarifas de las grandes ciudades españolas. Se da la circunstancia de que más del 41% de los viajeros que usan este título en Sevilla no realizan transbordo, por lo que, de hecho, una gran cantidad de viajeros tiene «asumido» el uso de un único título de bonobús. La tarjeta mensual pasará a costar de 30 a 32,50 euros, un 8,3% más. Teniendo en cuenta que los usuarios de este título, algo más de un 6,8% de viajeros, la utilizan entre tres y cuatro viajes diarios, el coste por viaje tiene una «pequeñísima repercusión», según la empresa. También este título tiene el precio más bajo de todas las grandes ciudades, algunas con un 50% más. Incluso en ciudades andaluzas más pequeñas el coste de este título es mayor. Así, en Málaga tiene un precio de 34,62 euros y en Córdoba de 38 euros. Mayores son en Valencia (37,40 euros), Madrid (46 euros) y Barcelona (47,30 euros). Los nuevos precios fueron aprobados con el voto en contra del representante del grupo popular en el Ayuntamiento y con la abstención de de la Asociación de Consumidores en Acción (Facua). El vicepresidente de la compañía, Juan Ramón Troncoso, explicó ayer que todas las ciudades con las que Sevilla puede asemejarse «están inmersas en la misma situación», por lo que, comparativamente, «seguimos siendo el servicio público de transportes más económico del país». Aseguró que se pretende «facilitar» y fidelizar el uso de la clientela, razón por la que el billete univiaje se ha subido diez céntimos «para gente que no utiliza el autobús con frecuencia». Durante el debate, el grupo de IU presentó un documento de medidas no tarifarias para la mejor financiación de Tussam que, según la federación de izquierdas, ha sido saludado por los trabajadores, vecinos, consumidores y usuarios. Estas propuestas se debatirán en una mesa donde estarán presentes los agentes implicados, ya que, tal como ha sostenido públicamente la empresa, la viabilidad de Tussam no pasa únicamente por subir las tarifas. El documento de IU defiende unas medidas bajo el lema de Menos tarifa y más velocidad comercial. IU se muestra consciente de la «delicada» situación por la que atraviesa la empresa, y está convencida de que «como mejor se ayuda al saneamiento de sus cuentas y al equilibrio financiero es apostando seriamente por otras medidas que complementen al precio del billete y que realmente le produzcan ingresos». El aumento de la velocidad comercial «debe ser una prioridad indiscutible», apostando para ello por un mayor número de kilómetros de carriles bus, plataformas reservadas exclusivas y contracarriles en los cambios a sentido único, dobles canceladoras en todas las líneas, estaciones de prepago, la extensión del número de prioridades semafóricas, mejorar la grúa municipal al servicio de la velocidad comercial, con su gestión directa, así como la de la zona azul. También aboga por el establecimiento de áreas verdes, que son espacios delimitados para aparcar vehículos privados con el objetivo de que los ingresos obtenidos por aparcar coches privados se destinen a la financiación del transporte público.