
«Cuando hablamos de un metro subterráneo lo hacemos con carácter general y el hecho de que vaya en superficie no afectaría a ninguno de los barrios de referencia ni a puntos como la avenida de la Palmera», defendió Aguilar, que señaló que ello sólo se modificaría en el caso de que «los vecinos traigan propuestas diferentes, razonables y consideren que sea necesario».La consejera de Obras Públicas abundó en el debate vecinal señalando que la primera reunión mantenida con la comisión ejecutiva del Plan Estratégico Sevilla 2020 es «el pistoletazo de salida» de éste. Así, se prevé que en este mes puedan salir a información pública los anteproyectos, «que quedarán cerrados cuando tengamos información sobre las alegaciones, con todo lo que se tenga que aportar», paso que se calcula puede estar en unos dos o tres meses. «Queremos un debate leal, abierto y vivo en torno al metro», especificó.En relación a las obras, Aguilar recordó que los trabajos serán «simultáneos, pero no a la par», y que aquellos tramos que se vayan terminando se pondrán en carga sin esperar a que toda la red esté finalizada. Los trabajos darán empleo a un espectro aproximado de 2.500 personas. Asimismo, dijo que las líneas, tal como están planeadas en base al peso poblacional, la demanda y la interconexión, darán servicio a medio millón de habitantes «que tendrán a menos de 500 metros una estación».