La llegada de los Negritos a la carrera oficial se retrasará 20 minutos para evitar el parón por los oficios de la Catedral.El Jueves Santo, uno de los días de la Semana Santa que parecían más inamovibles, se remodela. La segunda cofradía del día, la Exaltación, cambia su puesto con la cuarta, Montesión. Además, la que abre el día, los Negritos, retrasa en 20 minutos su llegada a la Campana, inicio de la carrera oficial, para evitar el tiempo de espera que cada año sufre antes de entrar en la Catedral al tener que esperar a que termine la celebración de los oficios, con lo que toda la jornada se retrasará.
El cambio se probará este año y, si funciona, se repetirá en sucesivas Semanas Santas.El acuerdo se forjó en una reunión mantenida en la noche de ayer por los hermanos mayores de las corporaciones del día, aunque el cierre definitivo de todos los pormenores y flecos, en lo que a horarios e itinerarios se refiere, concluirá en el día de hoy con un nuevo encuentro. Ayer se dio oficialidad al intercambio de puestos entre la Exaltación y Montesión. La hermandad de la calle Feria adelantará sus horarios oficiales en unos 55 minutos, aunque será en los próximos días cuando se fijen los horarios definitivos. Por su parte, la Exaltación tendrá que retrasar todos sus horarios en unos 95 minutos. La llegada de la Hermandad de Santa Catalina a la Campana se producirá a las 19:40.Según explicó Rafael Buzón, hermano mayor de Montesión, a este periódico, la medida se llevaba estudiando bastante tiempo y posibilitará una mejora general para todas las cofradías de la jornada: «Cuando salimos de la Catedral alcanzamos a los Caballos en la calle Francos ya que ellos, a su vez, tienen que estar parados mientras sale la Hermandad de Pasión del Salvador. Con la permuta entre ambas hermandades y el retraso del día se evitará este problema y además permitiremos que nuestro cuerpo de nazarenos no sufra tantas paradas. También conseguimos que la entrada en nuestra capilla se adelante, con todo lo que ello conlleva para los miembros del cortejo».El detonante de este cambio de puestos en la nómina ha sido el problema que sufre cada año la cofradía de los Negritos que cuando llega a la Catedral, a las 18:40, sufre un gran parón al tener que esperar a que terminen los oficios. Esta circunstancia hace que el día ya acumule un retraso desde el principio que afecta, sobre todo, al Valle y Pasión, las últimas de la jornada en salir de sus templos. Al producirse este retraso, Pasión tiene que esperar unos minutos para ponerse en marcha, lo que hacía que se formara un tapón al no poder avanzar la Exaltación y Montesión en su regreso a sus templos por la zona de la plaza del Salvador.Para evitar los retrasos, se propuso inicialmente que la jornada comenzara 20 minutos más tarde. Los Negritos tendría que entrar en la Campana a las 17:50, en vez de las 17:30. Con esta medida, la Hermandad de Montesión, de haber mantenido su cuartos puesto en la nómina, encerraría el palio en su capilla sobre las dos de la mañana, con varias hermandades de la Madrugada ya por las calles y la Macarena pasando muy cerca de la capilla del Rosario, algo que se quería evitar a toda costa. La solución a este nuevo problema ha sido la de permutar el orden entre Montesión y la Exaltación. Ahora, el palio de Montesión entrará unos 55 minutos antes, sobre las 0:35, mientras que la Hermandad de la Exaltación se verá obligada a retrasar sus horarios unos 95 minutos. Con el retraso del día y la permuta, el palio de la Virgen de las Lágrimas pasará a ser el último de la jornada en recogerse, pasada la una y media de la madrugada.