Andalucía será la musa que inspire las reformas del Hotel Alfonso XIII. La remodelación, que comenzará el próximo 1 de junio y se prolongará hasta el 31 de marzo de 2012, tratará de recuperar el estilo regionalista del edificio, inaugurado en 1928, un año antes de la Exposición Iberoamericana. La cadena Starwood –empresa que gestiona el hotel, gracias a un contrato de concesión con el Ayuntamiento– pretende, no obstante, adelantar las obras lo máximo para que la reapertura se produzca el 28 de febrero, Día de Andalucía.Las obras de remodelación tendrán una inversión de 20 millones, una cantidad que estará repartida en distintos aspectos técnicos de la reforma. En los trabajos participarán empresas como EC Harris, que será la encargada de coordinar y supervisar las obras; los arquitectos de Demópolis; y HBA, empresa responsable de la nueva decoración que tendrá el establecimiento.
En el proyecto está previsto, por un lado, mejorar aspectos de la decoración, pero también adaptar las infraestructuras del hotel a la nueva normativa del Código Técnico de Edificación (CTE) para garantizar así el confort y la seguridad de los huéspedes, según explicaron ayer los responsables de la reforma en una rueda de prensa. Estos trabajos se centrarán en mejorar aspectos como la accesibilidad, el aislamiento de las salas y la protección contra incendios.La zona privada, donde se sitúan las habitaciones, será la que sufra mayores cambios, mientras que la parte externa del edificio y las zonas comunes no sufrirán modificaciones en su estructura. Según el arquitecto Jaime Montaner (de Demópolis), es un requisito necesario para poder actuar en un edificio protegido y catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC): respetar la estructura “primigenia” del hotel, obra de José Espiau y Francisco Urcola.La decoración será el punto fuerte de las reformas. Las habitaciones de estilo árabe girarán hacia un enfoque más andalusí; las de tema castellano tendrán inspiración taurina y los dormitorios barrocos pasarán a tener una decoración autóctona y regionalista, es decir, inspirada en Andalucía.¿Qué busca el cliente que se aloja en Sevilla? Según el director general del Alfonso XIII Carlo Suffredini: “El cliente que viene a Sevilla quiere estar en Sevilla, vivir su decoración y el gusto sevillano”. Por ello, las mejoras en decoración e interiorismo tratarán de recuperar el estilo regionalista del 29.La primera habitación que se ha modificado ha sido la 124, una estancia piloto en la que se ha pasado del estilo árabe al andalusí. Pese a mantener el estilo clásico, el mobiliario y la decoración le dan un toque moderno, y los tejidos y las paredes lucen tonos más claros. De hecho, la estancia parece más espaciosa gracia a los colores y a la redistribución del espacio.La Suite Real será otros de los espacios mágicos del Alfonso XIII. “Se buscará recrear el ambiente que se vivió cuando el Rey Alfonso XIII se quedaba en Sevilla”, manifestó Carlo Suffredini. Esta estancia de 189 metros cuadrados, que cuenta con dos habitaciones, una sala de estar, dos baños y una biblioteca, trasladará a sus huéspedes a “tiempos pasados”, según el director del hotel.Una de las nuevas apuestas del Alfonso XIII será la recuperación del Bar Americano. El bar, ubicado dentro del restaurante, contará con una barra en el lateral en la que se servirán combinados y comidas internacionales. La decoración de este establecimiento recuperará la idea romántica de la época dorada de los viajes, volviendo también a principios del siglo XX. El secreto estará en el uso de espejos, baúles, cuero, madera…Otros espacios, como el bar Alfonso y la terraza Martini, se ampliarán. Es más, ambos pasarán a ser un bar de tapas con una terraza más amplia con la que el hotel busca “abrirse” a la ciudad. También reabrirá sus puertas el restaurante asiático, un espacio situado junto a la piscina, que lleva cerrado cerca de un año.¿Qué supone para el hotel Alfonso XIII una obra de tal envergadura y mantener sus puertas cerradas durante diez meses? Aunque Carlo Suffredini no quiso dar cifras, calculó que tardarán de 10 a 15 años en recuperar tanto las pérdidas por el cierre como la inversión en la obra.A pesar de este impacto económico, el director general del hotel más lujoso de la ciudad matizó que los clientes no sufrirán las consecuencias y que los precios de las habitaciones no subirán. “No vamos a pedirle al cliente que contribuya al gasto”, afirmó.Sí notarán el cambio los 160 trabajadores incluidos en el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), en el que se garantiza la recuperación de los puestos de trabajo una vez acabada la remodelación. Pero la actividad no cesará finalmente hasta el próximo 31 de mayo, cuando el Alfonso XIII dirá (sólo) hasta luego a los sevillanos y a sus clientes.
Fuente: http://www.elcorreoweb.es/sevilla/patrimonio/111197/nuevos/aires/29/hotel/alfonso/reformas