La iglesia de San Agustín de Marchena (Sevilla), levantada en la segunda mitad del siglo XVIII, entre la transición del barroco al neclásico, sufre un grave «deterioro» por lo que a sus cubiertas se refiere y las últimas lluvias torrenciales han motivado la clausura del espacio sobre el que se alza la cúpula central, lo que según el Ayuntamiento ha obligado a desplazar la celebración de las misas.
El alcalde de Marchena, Juan Rodríguez Aguilera (PA), informó a Europa Press de que «desde hace bastantes años», las cubiertas de este templo, una «verdadera joya» del patrimonio histórico marchenero, «tienen mal estado», aunque el temporal de viento y fuertes precipitaciones que ha castigado a Andalucía