Siempre que viajamos al extranjero tenemos cierta intranquilidad por el mero hecho de estar en un sitio desconocido. La mayoría de las veces no es más que una sensación que no llega a transformarse en realidad, pero no cabe duda de que la posibilidad de desorientarnos en las calles, ser estafados por un pícaro vendedor o sufrir un robo en un momento de descuido, por remotas que sean, siempre están presentes. A los foráneos les ocurre lo mismo cuando visitan Sevilla y el Ayuntamiento quiere que esos temores no sean mínimos, sino inexistentes, de ahí que haya puesto en marcha un proyecto para reforzar la seguridad destinada a los turistas internacionales.
Dicho proyecto ha sido bautizado como ‘Servicio de Atención al Turista Extranjero’ y su sede estará situada en un lugar estratégico a la par que privilegiado: el Patio de Banderas. Esta nueva comisaría tiene como misión principal atender las reclamaciones de quienes visitan Sevilla, desde denunciar hurtos o anular tarjetas de crédito hasta contactar con los consulados o familiares del país de procedencia en el caso de que fuera necesario. La inauguración de las dependencias tuvo lugar la semana pasada y corrió a cargo del alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido, y del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
El edificio, que es propiedad del Estado y ha sido rehabilitado para ser compartido por la Policía Local y la Policía Nacional, ya operó como comisaría del distrito Centro hace una década cuando se clausuraron las instalaciones de La Gavidia y aún no estaban construidas las de La Alameda. Prestará servicio los 365 días del año de 8:00 a 22:00 horas y pretende poner un estrecho cerco a los carteristas y delincuentes que se aprovechan del ensimismamiento que provoca la belleza de Sevilla en los extranjeros. Con todo, cabe reseñar que España es el tercer país más seguro de Europa y Sevilla está en la parte alta de la clasificación nacional.
de pasajeros que se produjo con motivo de la Expo de 1992, mientras que las cifras del AVE se mantienen más o menos estables. Tampoco hay que olvidarse de los cruceros, cuyo boom ha permitido que más de 13.000 turistas hayan arribado a la ciudad en lo que va de año a través del río Guadalquivir, lo cual supone un incremento de más del 50%. Obviamente, todo ello se palpa día a día en el ambiente y en los monumentos más emblemáticos, los cuales han recibido más de un millón de visitas cada uno en 2011.
Corría el año 1254 cuando el Rey Alfonso X, también llamado el Sabio, hijo de Fernando III el Santo otorgaba el permiso para la celebración en Sevilla de dos ferias anuales, una de primavera en abril y otra de otoño en San Miguel. De ambas se tenía lejanos recuerdos cuando en 1846 dos sevillanos de adopción, concejales del Ayuntamiento hispalense, el vasco José María Ybarra y el catalán Narciso Bonaplata, se les ocurría la hermosa idea de su restauración.Tras su propuesta formal, y previo estudio por parte de la comisión designada a tal efecto, el Ayuntamiento aprobó el 18 de septiembre de 1846 la celebración de una única feria anual en los días 18, 19 y 20 de abril, dejando la de San Miguel para un «después» y evitando la coincidencia en fecha con la de Carmona. El 5 de marzo de 1847 Doña Isabel II estampaba su firma en una Real Orden confirmatoria.
Pese a esta recuperación, en el contexto de los últimos doce meses, Sevilla continúa siendo la única ciudad que ha empeorado su nivel de rentabilidad en el último año, registrando un descenso de 6,8 por ciento en el beneficio bruto por habitación disponible (GOP PAR).Los hoteles de cuatro y cinco estrellas de Sevilla lograron aumentar en 9,1 puntos porcentuales su nivel de ocupación en febrero, hasta el 50,1 por ciento, con un incremento del precio medio del 3,8 por cient, hasta 43 euros, según revela el informe mensual ´HotStats España´, realizado por la consultora TRI Hospitality en colaboración con la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat).
El Cabildo de la Catedral permite acceder a los techos de la Catedral a través de una visita concertada para grupos. El eco de las setas ‘encarnadas’ convertirá al Metropol-Parasol en el monumento más llamativo de la ciudad durante varios años. Pero, como todos sabemos, Sevilla tiene mucho más. Y en su catedral, el templo gótico más gigantesco del planeta, hay otra novedad que permitirá al ciudadano o extranjero sumergirse en las entrañas medievales de la ciudad.Un programa del Cabildo de la Catedral de Sevilla ofrece la posiblidad de acceder a las cubiertas del templo a través de una escalera de caracol situada junto a la tumba de Colón. Este paseo por las alturas es posible sobre los dos primeros niveles en los que se estructuró la iglesia. En ellos, los huecos de las bóvedas estan cubiertos con vasijas y tinajas, que alisaron el terreno para favorecer el acceso. Por contra, el último nivel conserva estas cavidades, negando al visitante la más alta de las vistas.La visita concluye con un pequeño pasadizo en el interior de la Catedral con restos almohades, renacentistas y barrocos. Desde ella, el invitado podrá espiar de forma discreta el altar mayor, las vidrieras y los ángelitos que lo rematan, que pasaran a ser observados tras siglos actuando como observadores.
El número de bares pasa de siete a catorce · La mitad de los establecimientos no tienen aún la correspondiente licencia para colocar mesas en la vía pública.El número de veladores en la calle Mateos Gago se ha duplicado en los últimos tres años, así como el número de establecimientos hosteleros. Antes sólo había bares de tapas, ahora hay hasta un restaurante italiano y uno chino, entre otros. En el año 2007, siete bares solicitaron a la Gerencia de Urbanismo la correspondiente licencia para poder instalar mesas y sillas en la vía pública. En aquel entonces había 25 repartidas por toda la vía. Tres años después, el número de locales se incrementa a 14 – la mitad son nuevos- y la cifra de veladores legalizados asciende a 45. Es decir, los bares se han duplicado en dicha calle, al igual que el número de terrazas. Algunos colocan más mesas y sillas de las permitidas; otros las ponen sin tener aún la correspondiente licencia, que suele ser de carácter anual. No todos los bares han tenido siempre veladores ni en todos los casos han venido solicitando y renovando los permisos, cuentan algunos hosteleros de la zona, que no quisieron dar sus nombres. Así, desde finales de 2010 y hasta comienzos de este mes de marzo, sólo siete de estos locales han renovado la licencia, por lo que pueden instalar terrazas, según los últimos datos facilitados a este periódico por la Gerencia de Urbanismo.
Organizada por el Ayuntamiento del municipio a través de la Sociedad Alcalá Comunicación Municipal y la colaboración de la Sociedad Canina Andalucía Occidental, en el segundo y último día los visitantes han podido disfrutar de la exhibición de los perros adiestrados de la Unidad Canina de la Policía Nacional, además de un vistoso pase de moda canina.La localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra ha sido este fin de semana referente mundial con la celebración de la XVII Muestra Nacional Canina y la XXXV Exposición Internacional Canina ´Provincia de Sevilla´ en el recinto ferial de San Juan, con más de 1.400 participantes y 2.500 ejemplares caninos.